Muy Ilustre Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de la Piedad

Con motivo de la reciente exposición de “Pasos Restaurados”, realizada por el Museo Nacional de Escultura y celebrada en nuestra ciudad en Marzo del año 2.000, fue encontrado el documento contractual para la realización del paso, entre la Cofradía y los escultores Antonio de Ribera y Francisco Fermín, discípulos de Gregorio Fernández, para que éste saliese en la Procesión de Disciplina del Viernes Santo.

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Este documento parece que aporta pruebas definitivas y sustituye a los datos extraídos por D. Juan Agapito y Revilla procedente de los Libros de Cabildos de 1.630 a 1.678, citado por Alarcos y Cobos.

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En éste se hacía referencia, que en Cabildo celebrado el 12 de mayo de 1.630, la Cofradía de Ntra. Sra. de la Piedad acordó realizar un nuevo paso, encargando a sus Alcaldes, el pintor Tomás de Prado y Pedro de Luna, y al escribano Diego de Medina, realizar las gestiones pertinentes.

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En el Cabildo,celebrado unos días más tarde, el 16 de mayo, los designados dieron cuenta de las gestiones realizadas, a los demás oficiales:

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De cómo se abía ablado a Gregorio Hernández
y Andrés Solanes escultores para açer el paso que 
se propuso açer en cabildo general y como se avia
echo un modelo en cera de todas las figuras que
abia de llevar y anssi mismo se avia tratado del
preçio. 

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El 30 de mayo los Comisionados por la Cofradía informaron de sus progresos:

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Abian echo junta con los escultores en cassa de
Gregorio Ernández escultor y con acuerdo del dho
Gregorio Ernández se avian repartido las figuras
del passo a los escultores cada uno la q podía açer
con más perfección.

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Por estas notas se puede pensar que estos acuerdos se llevaran a cabo para el paso del “Longinos”.

En los Cabildos celebrados el 3 de junio de 1.632 y 10 de mayo de 1.633, nuevas referencias hablan de los esfuerzos de la Cofradía para conseguir fondos con los que costear la obra. El 19 de junio de ese mismo año se cita la obra como iniciada.

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En 1.642 se empiezan a recoger limosnas para hacer frente al gasto. Francisco Solanes y Pedro Fernández ensambladores prometen hacer el tablero, dándoseles la madera de pino.

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En el Cabildo General de 16 de marzo de 1.642 se informa del estreno de un paso nuevo sin hacer referencia a ninguna de sus características Ya en el año de 1.644 y en la planta procesional de la Cofradía aparece el paso con la denominación de “PASSO NUEBO”, esta vez junto con el “LONGINOS” y “LA CRUZ”, lo mismo ocurrió en 1.648. En 1.649 ya aparece con el nombre de”PASSO NUEBO DEL ENTIERRO”.

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Manuel Canesí , en su “Historia de Valladolid” de 1.750, lo describe con las siguientes figuras:

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Jose Abarimatia y Nicodemus con Cristo difunto
en brazos, cuando le bajaron de la Cruz, la que está
a su vista, y la Magdalena y otra figura abriendo el
Sepulcro.

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El documento encontrado data del siglo XVII, y cambia todas las suposiciones que se habían hecho en torno al paso y su autoría. A continuación se hace una transcripción del documento correspondiente al legajo 1.943, folio 87-89v, del Archivo Histórico Provincial de Valladolid:

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En la ciudad de Valladolid, en quince dias del mes
de Mayo de mil seiscientos cuarenta y un años ante mi
escribano y testigos parecieron presentes de la una
parte Antonio de Ribera y Francisco Fermín,
escultores vecinos de esta ciudad, y de la otra parte la
Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad de esta dha
Ciudad, estando juntos y congregados en las casas de
la dha Cofradía donde hacen sus Cabildos, particular y
señaladamente Francisco Troncoso, secretario de
la Universidad y Luis Cid de Mardones...
...dijeron estar convenidos y concertados de que los
dhos Antonio de Ribera y Francisco Fermín han de
açer para la dha Cofradía un paso de escultura para
la procesión del Viernes de la Cruz de cada año, el
cual se ha de componer y ha de ser de cuando llevan
al sepulcro a Cristo Nicodemus y Abar y Mathía, y
así mismo para el adorno de él se ha de acompañar
con otras cuatro figuras que serán Nra Sra sentada
o de rodillas, como mejor se disponga el modelo,
demostrando sentimiento de ver llevar a su hijo y de
aberselo quitado la cual figura ha de ser en la parte
delantera y después se han de seguir las dhas de
Cristo, Nicodemus, y Abar y Mathia, que le llevan
en una sábana, la cual sabana ha de ser natural, y
el Cristo ha de ser acabada toda redonda, tan
perfeccionado por detrás como por delante, y el
cuerpo del Cristo por la cabeza ha de yr incorporado
en el pecho de Nicodemus, el cual a de yr a la mano
derecha, como miramos al paso, y el Cristo a de tener
caido el brazo izquierdo, y a de aber una figura de la
Magdalena incada o caida de rodillas y con una mano
y toalla natural, teniendo el dho brazo caido, y la otra
en la mejor disposición que convenga al paso y por la
parte de atrás de todas estas dhas figuras en el medio q
hace entre Nicodemus y Abar y Mathia, a de estar
figura de San Juan que tenga el brazo derecho del
Cristo con una mano y con la otra haciendo
demostración de sentimiento de ver la llaga, esta dha
figura ha de ser en pie y algo mas atrás este una
figura q represente un criado q quitaba la piedra del
sepulcro con una palanca, la cual a de ser airosa y
hecha con toda valentía, q la disposición del dho paso
se viene a componer de las dhas siete figuras, las cuales
lo han de ser del tamaño de las del paso del
descendimiento de la cruz de esta ciudad y han de ser
el Cristo y la mitad de las otras dhas figuras de madera de
pino de Soria por la parte de adelante y la otra mitad de
madera de pino de la tierra muy bueno, la cual madera a de
ser seca y buena y dhas figuras se han de ahuecar todo lo
posible por que el paso pese menos y todos los tornillos
necesarios para la fortificación de las dhas figuras y
seguridad para que con los va-y-viene tenga ningún
detrimento, se los ha de dar la dha Cofradía a los dhos
escultores, los cuales han de asentar la posición necesaria y
armar el paso antes que se pinte para q se vea si tiene algun
defecto y si lo tuvieren los dhos escultores le an de
enmendar las cuales dhas figuras las an de dar acabadas
mediando octubre que viene deeste presente año.

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En Cabildo General celebrado el 13 de Marzo de 1.994, se acuerda recuperar el Paso para sacarlo nuevamente en procesión. La Junta de Gobierno asesorada por el Director del Museo Nacional de Escultura, deciden reconstruir el cuerpo de José de Arimatea, del que solo quedaba la cabeza, restaurándose las figuras de Cristo y Nicodemo El cuerpo de Arimatea lo realizó José Antonio Saavedra durante los años 1.994.1.995.

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Al mismo tiempo se encarga al escultor Francisco Fdez León la construcción de la carroza, quien lo realizó de manera clásica y sobria en madera de raulí. El paso recuperado salió en procesión en 1.995 con la nueva denominación de “Cristo de la Cruz a María”.